Que l'euro va ser un error, ja només ho neguen els que fan del
"sostenella y no enmendalla" la seva divisa. Però una cosa és reconèixer que ha resultat un fiasco —tothom admet ara que la unitat monetària, sense unitat fiscal i econòmica, no funciona quan hi ha problemes— i un altre molt diferent desfer el camí fet. La pregunta del milió és, doncs:
¿ I ara què ?
Potser abans de intentar respondre-la, i per situar-nos una mica, val la pena donar molt ràpidament un cop d'ull a
l'article de
Mark Weisbrot a The Guardian.
Weisbrot critica durament els gestors de la eurozona perquè és un projecte inequívocament de dretes que condemna els països dits perifèrics a anys de penúria i sacrificis per mor de la política restrictiva imposada per Alemanya i els països del nord. És així —diu— fins al punt de que la conservadora Reserva Federal americana fa una política més progressista que el BCE. En efecte, mentre la primera s'ha compromès a mantindre el tipus de interès per sota del 0,25% per promoure la reactivació, el BCE, forçat per Alemanya, té com a únic objectiu controlar la inflació i no sembla que vulgui baixar del 1,5% actual.
"I la Fed —malgrat la seva incompetència al no anticipar la bombolla immobiliària que va deixar un forat de 8bn$— ha demostrat ser prou flexible en front de la recessió i la dèbil recuperació, creant més de 2bn$ dins d'una política monetària expansiva. En comparació, els extremistes que governen el BCE han estat apujant els tipus de interès des de l'abril, malgrat taxes d'atur a nivell de depressió en les economies dèbils de l'eurozona."
Però per si de cas algú es pensés que he pres com a referència un analista massa esquerrenós o radical, donaré la paraula a tres premis Nobel de Economia de prestigi tant indiscutible com Amartya Sen, Joseph Stiglitz i Paul Krugman. Per no allargar-me massa ho faré de manera telegràfica amb cites textuals extretes dels articles que enllaço en cada cas.
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Amartya Sen |
Amartya Sen. Nobel d'economia el 1998 per els seus treballs sobre la fam, els mecanismes de la pobresa i la democràcia com a raonament públic.
"El euro hace caer a Europa" (traducció una mica justeta. Es pot veure l'original aquí: "L'euro fait tomber l'Europe")
«...resulta muy penoso que haya tan poca inquietud sobre el peligro que amenaza en la actualidad al régimen democrático de Europa, el cual se manifiesta de manera insidiosa en la prioridad acordada a los imperativos financieros»
«...no estamos de acuerdo en que los sacrificios impuestos por los caballeros de las finanzas a los países en dificultad constituyan el remedio decisivo para asegurar la perennidad a largo plazo de su economía, ni tampoco que esos sacrificios sean capaces de garantizar la de la zona euro»
«Las reducciones presupuestarias llevadas a su máximo corren el riesgo de disminuir los gastos públicos tanto como las inversiones privadas»
«La descabellada decisión de adoptar una moneda única, el euro, sin más integración política ni económica jugó ciertamente un rol en esta crisis, más allá de las irregularidades financieras cometidas por países como Grecia o Portugal»
«Sin embargo, ni los beneficios a largo plazo (...) dispensan a Europa de interrogarse sobre la pertinencia de las condiciones —y del calendario— impuesto a Grecia»
«Para mí no es más que un pobre consuelo recordar que me opuse fervientemente al euro, a la vez de manifestarme muy favorable a la unidad europea. Mi inquietud se derivaba en especial del hecho de que cada país renunciaba así a decidir libremente su política monetaria y las reevaluaciones de las tasas de cambio, todas estas cosas que, en el pasado, fueron muy útiles para los países en dificultad»
«Repensar la zona euro crearía numerosos problemas, pero los asuntos espinosos deben ser inteligentemente discutidos, y Europa debe comprometerse democráticamente a hacerlo»
© Le Monde 3/7/2011
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Joseph Stiglitz |
Joseph Stiglitz. Professor at Columbia University, 2001 Nobel laureate in economics.
"¿Se puede salvar al euro?"
«El premio Nobel Robert Mundell estableció las condiciones según las
cuales una moneda única podía funcionar. Europa no cumplió con esas
condiciones en su momento; y sigue sin hacerlo»
«En el momento de la creación del euro, a muchos los preocupaba su
viabilidad a largo plazo. Cuando todo salió bien, esas preocupaciones
pasaron al olvido»
«Consideremos el caso de España, que tiene una tasa de desempleo del 20%
-y más del 40% entre la gente joven-. El país tenía un excedente fiscal
antes de la crisis; después de la crisis, su déficit aumentó a más del
11% del PBI. Pero, según las reglas de la Unión Europea, España ahora
debe recortar su gasto, lo cual, probablemente, exacerbe el desempleo»
«Para muchos, tanto dentro como fuera de Grecia, era una situación
peculiar: se habían invertido miles de millones en salvar a los grandes
bancos, pero evidentemente salvar a un país de once millones de personas
era un tabú»
«Una serie de ofertas a medias y de vagas promesas, destinadas a calmar al mercado, resultaron un fracaso»
«Alemania (al igual que China) ve sus ahorros elevados y sus proezas
exportadoras como virtudes, no vicios. Pero John Maynard Keynes decía
que los superávits conducen a una débil demanda agregada global –los
países que tienen superávits ejercen una “externalidad negativa” en sus
socios comerciales-. De hecho, Keynes creía que eran los países con
superávits, mucho más que los países con déficits, los que planteaban
una amenaza a la prosperidad global»
«No debería obligarse a los países cuyos déficits han aumentado como
resultado de la recesión global a caer en una espiral mortal –como
sucedió con Argentina hace una década»
«Una solución que se propone es que esos países pergeñen el
equivalente de una devaluación –una disminución uniforme de los
salarios-. En mi opinión, esto es inalcanzable, y sus consecuencias
distributivas son inaceptables. Las tensiones sociales serían enormes.
Es una fantasía»
«Existe una segunda solución: la salida de Alemania de la eurozona o
la división de la eurozona en dos subregiones. El euro fue un
experimento interesante, pero, como el casi olvidado mecanismo de tipo
de cambio (MTC) que lo antecedió y se desintegró cuando los
especuladores atacaron la libra británica en 1992, carece del respaldo
institucional necesario para que funcione»
«Existe una tercera solución –y tal vez Europa llegue a darse cuenta
de eso- que es la más promisoria de todas: implementar las reformas
institucionales, incluyendo el marco fiscal necesario, que deberían
haberse implementado cuando se creó el euro»
«No es demasiado tarde para que Europa implemente estas reformas y,
así, estar a la altura de los ideales, basados en la solidaridad, que
subyacen la creación del euro. Pero si Europa no puede hacerlo, entonces
quizá sea mejor admitir el fracaso y pasar a otra cosa...»
Copyright: Project Syndicate, 2010.
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Paul Krugman |
Paul Krugman. professor of Economics and International Affairs at Princeton University. 2008 Nobel Prize in Economics.
"La creación de un 'eurocaos'"
«Últimamente, las noticias financieras han estado dominadas por crónicas de Grecia y de otros países de la periferia europea. Y con razón»
«Pero me ha inquietado la información que se centra casi exclusivamente en las deudas y en los déficit europeos, con lo que da la impresión de que todo se reduce al derroche gubernamental»
«Pero la verdad es que la falta de disciplina fiscal no es la única, ni la principal, fuente de problemas de Europa»
«No, la verdadera historia que está detrás del eurocaos no se basa en el despilfarro de los políticos, sino en la arrogancia de las élites; concretamente, las élites políticas que instaron a Europa a adoptar una moneda única mucho antes de que el continente estuviera preparado para un experimento de este tipo»
«...con su clima cálido y sus playas, España era también la Florida de Europa y, al igual que Florida, experimentó un enorme auge inmobiliario. La financiación de este boom provenía principalmente del extranjero: hubo entradas gigantescas de capital procedentes del resto de Europa, en especial de Alemania»
«La consecuencia fue un crecimiento rápido combinado con una inflación significativa: entre 2000 y 2008, los precios de bienes y servicios producidos en España aumentaron un 35%, en comparación con un incremento de sólo un 10% en Alemania. Debido a la subida de los costes, las exportaciones españolas fueron perdiendo competitividad, pero la creación de empleo siguió siendo fuerte gracias al boom inmobiliario»
«Y entonces estalló la burbuja. El paro en España experimentó un drástico repunte, y el presupuesto incurrió en un profundo déficit»
«Y no hay mucho que el Gobierno español pueda hacer para mejorar las cosas»
«Si España siguiera teniendo su antigua moneda, la peseta, podría remediar rápidamente el problema con una devaluación (por ejemplo, reduciendo el valor de la peseta un 20% con respecto a otras divisas europeas). Pero España ya no tiene su propio dinero, lo que implica que sólo puede recuperar su competitividad mediante un lento y doloroso proceso de deflación»
«Ahora bien, si España fuera un estado de Estados Unidos y no un país europeo, la situación no sería tan mala (...) España recibiría una gran cantidad de apoyo automático en la crisis: el sector inmobiliario de Florida ha pasado de la expansión a la recesión, pero Washington sigue enviando los cheques de la Seguridad Social y del Medicare»
«Pero España no es un estado de Estados Unidos y, por tanto, está metida en un buen lío»
«Nada de esto debería extrañarnos demasiado. Mucho antes de que naciera el euro, los economistas advertían de que Europa no estaba preparada para una moneda única. Pero se hizo caso omiso de estas advertencias y se produjo la crisis»
«¿Y ahora qué? La disolución del euro es prácticamente impensable, por meros motivos prácticos. Como dice Barry Eichengreen de Berkeley, un intento de reintroducir una moneda nacional desencadenaría "la madre de todas las crisis financieras". Así que no hay marcha atrás: para hacer que el euro funcione, Europa tiene que avanzar mucho más en la unión política, para que los países europeos empiecen a funcionar más como estados de Estados Unidos»
«Pero eso no va a suceder de hoy para mañana. Lo que veremos probablemente a lo largo de los próximos años es un doloroso proceso de remiendos: rescates acompañados de exigencias de una austeridad despiadada, y todo con un trasfondo de desempleo muy elevado, perpetuado por la dolorosa deflación que ya he mencionado»
© 2010 New York Times News Service
Els dos primer articles son de fa menys d'un més, els de Stiglitz i Krugman son de fa un any i mig. Però com és pot veure, tots son igualment actuals. Respecte de la qüestió plantejada al principi, "¿I ara què?", destacaria les tres solucions que apunta Stiglitz, i que he ressaltat en negreta. La tercera és en la que tothom reclama, però el mateix Krugman diu que pot comporta un procés dolorós d'anys; la segona fora la més pràctica, i la primera és la que estan intentant endossar-nos :( També val la pena destacar la menció que fa del pensament de Keynes respecte de les economies amb superàvit.